El despido disciplinario del trabajador es la extinción de la relación laboral, llevada a cabo unilateralmente por el empresario, y que viene debidamente justificada por una falta disciplinaria de carácter muy grave cometida por el trabajador. En este post te queremos hablar de diferentes aspectos a tener en cuenta respecto al despido disciplinario:
- Qué tipo de faltas lo justifican
- Qué efectos tiene
- Qué plazo para reclamar tenemos disponible por ley
Veamos detenidamente lo que necesitas saber sobre este problema.
El despido disciplinario del trabajador
El despido disciplinario viene justificado por un comportamiento grave y además culpable del trabajador que ha incumplido sus obligaciones laborales y/o causado un daño a la empresa con tal actitud. Es la decisión del empresario de extinguir su relación laboral con un trabajador que ha incurrido en incumplimientos graves
Como te decíamos, el despido disciplinario del trabajador apunta a una conclusión de la relación laboral entre empresa y trabajador, que toma el empresario de manera unilateral debido a que el trabajador ha cometido —presuntamente al menos— una infracción.
El despido disciplinario viene justificado por un comportamiento grave y además culpable del trabajador que ha incumplido sus obligaciones laborales y/o causado un daño a la empresa con tal actitud.
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Esa infracción se tipifica en el artículo 54 del Estatuto de los Trabajadores o bien en el convenio colectivo de esa empresa o sector. De cumplirse, la empresa puede despedir al trabajador sin tener que abonar concepto indemnizatorio alguno.
En caso de que se demostrara la improcedencia de ese despido, entonces sí se podría considerar una indemnización proporcional.
Acreditar el despido disciplinario del trabajador
El despido disciplinario del trabajador tiene que acreditarse. Esto no funciona despidiendo al trabajador acusándolo de una falta grave y se terminó. Se tiene que probar esa conducta negligente, esa falta cometida por el trabajador que forma parte de las conductas que constituyen motivo de despido disciplinario.
Proporcionalidad
El despido disciplinario del trabajador tiene que ser además una sanción —la máxima que puede poner una empresa a su trabajador— proporcional a la infracción cometida. Existen grados y en función de estos, se contemplan unas u otras medidas como proporcionadas.
Esto es: no es igual llegar quince minutos tarde que robar en la caja; ni es igual llegar tarde un día puntual que todos los días. Las sanciones no pueden ser las mismas.
Tipos de faltas que justifican el despido disciplinario
Acudimos al artículo 54 del estatuto de los trabajadores. En él se desglosan todas las infracciones:
- Faltas de puntualidad o asistencia no justificadas por razón válida
- Indisciplina o la desobediencia. El empresario tiene la facultad de dar directrices a su plantilla. No acatarlas y causar perjuicios a la empresa con ello, puede ser motivo de despido.
- Comportamiento agresivo, verbal o físico.
- Romper la buena fe contractual por parte del trabajador. Obrar sin buena fe sería la competencia desleal, el uso indebido del equipamiento de la empresa.
- Caída en el rendimiento de trabajo.
- Embriaguez o toxicomanía reiterada. No presentarse fresco/a y despejado/a a trabajar
- Acoso discriminatorio (de género, étnico, religioso…) y acoso sexual.
Estos hechos referidos pueden constituir motivo de despido disciplinario del trabajador según el estatuto de los trabajadores, pero como hemos dicho, el convenio colectivo puede matizar y ampliar esos comportamientos que se constituyen en faltas que merecen esa medida sancionadora por parte de la empresa.
Ya sabes todo lo que hay que saber sobre el despido disciplinario. Pero hay que incidir en cómo debe actuar el trabajador para defender sus intereses y derechos. NO tienes que conformarte con un despido disciplinario si crees que no está justificado por los hechos o más allá, por la gravedad de los mismos. Si tienes dudas puedes consultar con nuestros especialistas ahora mismo y te responderemos de inmediato.
